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Siguiendo con nuestro recorrido en el municipio de Santa Rosa de Cabal (Risaralda), uno de los principales destinos turísticos del país, hoy les contamos que además de sus fuentes termales, el Nevado de Santa Isabel, la Laguna del Otún, los chorros de don Lolo, la finca del café, el Café de Leo, cuenta con una afluencia de turistas de todo el país y el extranjero, que vienen a probar su famoso Chorizo, El Chorizo Santarrosano, un embutido que se ha convertido en un atractivo gastronómico innegable, de esta hermosa tierra. Una vez en el municipio, se encuentra el chorizo de la mano de expertos fabricantes que te ofrecen a su vez las más exquisitas preparaciones. Son tradicionales los preparados por ChoriSant, Choripaco, Chorizandro, Don Julio, Chorinanos, Chorizadas, entre muchos otros; también se encuentran en asaderos pequeños ubicados en las aceras de las calles de la ciudad y en adelante en casi todos los restaurantes que se encuentran en la ruta hacia los termales.

El singular sabor de este producto elaborado artesanalmente con carne de cerdo pulpa, cortada en trocitos, o molida, lo ha hecho famoso en el mundo, y en nuestra región, es símbolo y patrimonio gastronómico logrado por décadas de experiencia y tradición familiar. Las diferencias entre los chorizos radican en el troceado de las carnes y el tipo de condimentos empleados. Generalmente se consume ahumado, cocido, asado, frito, y quienes aman degustarlo generalmente lo prefieren acompañado de arepa, limón y tomate, resaltando en él, características que le otorgan un sabor y textura incomparables.

Santa Rosa de Cabal ostenta el Guinness Record más grande del mundo, en el año 2010 con 1.917 metros de sabor, de donde salieron 14 mil porciones, las cuales fueron degustadas por la ciudadanía Risaraldense y sus afortunados turistas. 20 fabricantes de chorizo lograron que este producto típico superara con creces los 1.245 metros del fabricado en Toluca, México que hasta ese momento era considerado el más grande del mundo.

Este fue un evento organizado con el apoyo de la Gobernación de Risaralda y la coordinación de la Cámara de Comercio de Santa Rosa de Cabal. Desde entonces, anualmente se lleva a cabo en el municipio, el Festival del Chorizo Santarrosano, en donde su población y turistas gozan de éste delicioso producto, ofrecido por los principales productores de la ciudad. En la actualidad hay más de 150 productores registrados en la cámara de comercio; siendo la cuna gastronómica de este bocado anhelado por muchos comensales.

Historia del Chorizo Santarrosano

En los albores de la fundación, las reses eran escasas pero los cerdos proliferaban; por ejemplo en octubre de 1858, por cada dos reses se mataban 16 cerdos. Los porcinos se convertían protagonistas de verdaderas “asonadas de diablos”  causando estragos en las débiles bases de las pajizas casas de bahareque, obligando al alcalde a reglamentar su tenencia por decreto, condenando a muerte a los inquietos semovientes que medraban en la zona urbana. La parte resolutiva del referido acto administrativo., rezaba: “…en 48 horas no habrá en la plaza y calles de esta población marranos de uno y otro “secso” (sic) andando libremente porque serán muertos y su carne se distribuirán entre los presos pobres. Más adelante, la radical medida se dulcificó y los cerdos sorprendidos fuera del corral, eran llevados a un sitio escogido por la alcaldía para  albergar a los semovientes sueltos, llamado “coso municipal”; el dueño debía pagar una multa en la tesorería del distrito si quería rescatar a su “caribajito”.

Al sacrificarse poco ganado vacuno, se perfeccionaron las destrezas culinarias de los Santarrosanos en la preparación de la carne de cerdo y sus derivados como el chorizo. Luego, a partir de 1925, cuando el tren, convertido en heraldo del progreso, llegó a nuestra ciudad, el proceso se enriqueció con los saberes de familias procedentes de otros lares que se radicaron en Santa Rosa y llevaron el satinado “bouquet” a los niveles de excelencia que le dieron reconocimiento nacional.

Era tradicional ver a las familiar salir al paso del tren a ofrecer este manjar en una especie de caldo acompañado de su arepa a los viajeros que no podía despreciar la oportunidad para seguir su marcha de saciar su apetito con este plato y claro el voz a voz se fue propagando, al punto que los arrieros que a su paso por Santa Rosa de Cabal en camino al norte o al sur lo fueron comercializando de ciudad en ciudad con un ahumado que permitía su conservación.

Su fama creció y hoy su marca de origen lo protege de imitaciones permitiendo a los Santarrosanos llevar este producto exclusivo a todo el país e incluso exportarlos a otros lugares del mundo donde es reconocido su sabor.

Así que en tu próxima visita no dudes en disfrutar este manjar, nosotros te llevamos..

Fuente: Expedición Entreriosycafe Pueblos con encanto de Risaralda, Risaralda.Travel. Rutas del PCC. Iris Eliana Orozco y Manuel Tiberio Flórez

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